Un verdadero clásico, el aceite de guindilla es un condimento muy fácil de preparar y seguro desde el punto de vista microbiológico, siempre que se respeten unas sencillas reglas de seguridad alimentaria.
Este aceite picante preparado con guindilla se puede utilizar en muchas ocasiones: para dar un toque extra a la pasta o bruschetta o para dar sabor a carnes y verduras. La preparación se puede realizar de dos formas: utilizando chiles frescos o secos .
La receta para prepararlo con chiles secos es más sencilla: si quieres usarlos frescos, es fundamental lavarlos y secarlos para luego blanquearlos durante 2-3 minutos en vinagre de acidez al 6%, luego dejarlos secar por completo antes de agregarlos al aceite. Este paso evitará el peligro botulínico.
Tiempo de preparación: 10 minutos + tiempo para que las guindillas se sequen y descansen
Ingredientes para 500 ml de aceite:
- 500 ml de aceite de oliva virgen extra
- 4-5 pimientos picantes
Estacionalidad : recetas de verano
Plato : conservas vegetarianas y veganas
Cultivar ají es una gran satisfacción, la elección de la variedad le permite variar el picante, la apariencia y el sabor. Desde el tradicional calabrés hasta el temible habanero, puede elegir su tipo favorito y probar este aceite picante en variaciones siempre diferentes.
Receta de aceite con chiles secos
Este aderezo picante es muy fácil de hacer . Su calidad depende en gran medida de la bondad del aceite utilizado , la elección de un aceite de oliva virgen extra con carácter, como los típicos del sur con un sabor muy fuerte, es quizás el que mejor se mueve con las guindillas.
Para preparar el aceite, lave y seque los pimientos . Ponlas a secar en el horno a 80 ° C durante unas horas. Los tiempos dependen del tamaño de los pimientos: estarán listos cuando se desmoronen en tus manos. Si tienes un secador aún mejor, esta es sin duda la mejor forma de mantener una alta calidad de sabores, evitando cocinar los pimientos pero secándolos a la perfección.
Es fundamental para la seguridad de la receta que estén perfectamente secas , esto permite evitar riesgos para la salud y la formación de moho en las conservas.
Después de secar los pimientos, déjelos enfriar completamente en un lugar seco. Una vez fríos, ponerlos en una botella de vidrio hermética y esterilizada, verter el aceite de oliva virgen extra y guardar en un lugar fresco y oscuro. Déjalo reposar durante aproximadamente una semana antes de usarlo , para que el aceite de oliva virgen extra absorba el picante adecuado.
Asesoramiento y variaciones de la preparación
El aceite de pimiento picante es fácilmente personalizable y se puede aromatizar de diferentes formas utilizando otras especias o hierbas del jardín.
- Grado de picante . La cantidad de chiles es indicativa y depende mucho de qué tan picante quieras que sea tu aceite. Use las variedades y cantidades de chiles que más le gusten para personalizar el condimento.
- Romero. Puede enriquecer su aceite con aromas como el romero. Es fundamental que las hierbas estén también completamente secas, o si quieres usarlas frescas es importante que hayan sido previamente escaldadas en vinagre y dejadas secar por completo. Estas precauciones se utilizan para hacer un aceite seguro, sin el riesgo de Botox,
- Ligero. El petróleo teme a la luz. Lo ideal es utilizar botellas de vidrio oscuro pero, si no las tienes, cúbrelas con papel de aluminio.
Cómo hacer aceite con chiles frescos
Si decidimos utilizar chiles frescos debemos recordar incluir vinagre en la receta, con su acidez crea una condición desfavorable para el Botox y hace que la receta sea segura. Después de haber lavado bien nuestros pimientos, los blanqueamos en agua y vinagre .
Alternativamente podemos aprovechar la sal, otro elemento que higieniza las conservas y nos protege de la temida bacteria. Por tanto, podemos decidir dejar los pimientos frescos en sal durante 24 horas. El tiempo en sal tiene el efecto de perder agua y desinfectar.
En cualquier caso, como ya se ha explicado para los chiles secos, el consejo sigue siendo hacer la receta con aceite de oliva virgen extra frío . Solo tenga paciencia durante 7 a 10 días para que tenga un sabor natural, sin tener que subir la temperatura. Calentar el aceite incluso de forma controlada para acelerar el proceso además de aromatizarlo provoca inevitablemente una pérdida de calidad del condimento.