Los controles a realizar a las plantas protegidas durante el invierno

Aunque todavía no ha llegado el momento de liberar las plantas sensibles de las sábanas que las protegen, ahora es necesario comprobar su estado de salud, para no correr el riesgo de encontrarlas sufriendo cuando llegue el verano.

Aunque todavía no ha llegado el momento de liberar las plantas sensibles de las sábanas que las protegen, ahora es necesario comprobar su estado de salud, para no correr el riesgo de encontrarlas sufriendo cuando llegue el verano.

Contenido procesado

  • Levanta las sábanas
  • Asegure las cubiertas
  • Limpieza
  • Los parásitos

A finales del año pasado, protegimos las sensibles plantas de los balcones con telas no tejidas, plástico, periódico o trasladándolas a invernaderos . Ahora que se han alargado los días conviene comprobar el estado de las plantas para no correr el riesgo de encontrarlas sufriendo. Esto es lo que debes hacer.

Levanta las sábanas

Las protecciones deben levantarse de vez en cuando para asegurar que el aire circule dentro del follaje para permitir una buena transpiración a la planta y evitar el ataque de enfermedades fúngicas . El peligro no lo constituye tanto la humedad invernal como la condensación que se puede formar debajo de la sábana protectora, que mojaría las hojas y la tierra si goteara. Un fallo en la recirculación del aire puede ser un problema grave incluso en el caso de que las plantas estén expuestas a la radiación directa del sol durante el día y sufran grandes cambios de temperatura debido al "efecto invernadero".

Asegure las cubiertas

Por lo tanto, debe asegurarse de que las cubiertas, especialmente las de plástico, aún estén levantadas por los tirantes colocados en la maceta para proteger el follaje. La exposición prolongada a los elementos puede haber desplazado las estacas: si el follaje ha estado en contacto directo con la superficie protectora fría e impermeable, puede haber sido dañado.

Limpieza

Las plantas no se deben podar en absoluto pero es importante quitar las ramas secas, torcidas y que presenten enfermedades . Se debe tener cuidado de oxigenar la tierra en la maceta de vez en cuando con un desyerbador para alejar a los insectos que buscan refugio y mantener la tierra seca. También se debe tener cuidado de vaciar los platillos de cualquier condensación, agua de lluvia o nieve que, al estancarse en los contenedores por la noche, podría congelarse comprometiendo el sistema radicular.

Los parásitos

La presencia de parásitos es el último paso importante que no debe olvidarse: la humedad y la condensación favorecen las enfermedades fúngicas y la aparición de la cochinilla ; los pulgones , en cambio, hay que buscarlos cerca de las tiernas gargantas de las que son voraces. Ante los primeros signos de estas enfermedades, aísle las plantas e intervenga con productos específicos.