Cómo mojar bien las plantas y macetas de terrazas y balcones

Generalmente las macetas de la terraza y el balcón se mojan con la regadera: hay que mover grandes cantidades de agua. Aquí hay algunos "trucos" para tener éxito con menos esfuerzo.

Generalmente las macetas de la terraza y el balcón se mojan con la regadera: hay que mover grandes cantidades de agua. Aquí hay algunos "trucos" para tener éxito con menos esfuerzo.

Quien posea una terraza o balcón y no disponga de un sistema de riego automático debe hacerlo a mano. Aquí, entonces, hay una procesión constante de regaderas todas las tardes de verano que llega a los balcones desde el punto de agua. Para facilitar esta aburrida y fatigosa operación, el secreto es tener al menos dos regaderas : es mejor llevar dos regaderas de diez litros en lugar de una regadera de veinte litros. El peso estará mejor equilibrado , el esfuerzo será menor, y una vez alcanzado el punto de distribución se podrá colocar uno, permitiendo no solo menos esfuerzo sino una dosificación más precisa. El reparto del agua en las macetas con regadera requiere precisión, para no mojar el exterior, y rapidez. UNAuna buena humectación debe ser uniforme y no localizada : la superficie libre debe estar inundada de modo que todo el suelo subyacente se vea afectado por la percolación del agua hacia abajo. El agua debe llegar al fondo del frasco, de modo que apenas aparezca en el platillo , sin estancarse nunca. En el caso después de aproximadamente un cuarto de hora se recomienda retirarlo , excepto aquellas plantas que aman la sombra parcial y se ven obligadas a los balcones al sol como hortensias y hostas.

Las reservas de agua escondidas

Bañarse todos los días con la regadera puede resultar agotador y no siempre si se tiene la oportunidad, sobre todo los fines de semana. Aquí entonces están los jarrones con reserva de agua, tomados del hidrocultivo , que tienen una cámara vacía en la base, por lo tanto sin orificios en el fondo, donde se puede acumular el agua. Si es necesario, es absorbido por las raíces que empujan activamente hacia estos reservorios, recordadas por el mayor gradiente de humedad. De esta forma la planta podrá absorber tanto del suelo como de la reserva, mostrando así una mayor autonomía y resistencia.

Agua que cae, el más antiguo de los sistemas, el mejor de todos

El mejor sistema para mojar las plantas es el más antiguo con agua que cae o se desliza, en ausencia de presión activa. El agua no se lava, no excava, no daña la estructura del suelo, se distribuye lentamente, se dosifica mejor y penetra uniformemente. Mejor aún si proviene de un tanque en el que ha podido descansar eliminando el cloro, decantando las impurezas y calentando hasta alcanzar el equilibrio con la temperatura ambiente .