Rotación de cultivos: ¡solo beneficios en primavera!

En el huerto, la rotación de cultivos es una técnica tradicional que ayuda a mantener el suelo rico de forma natural. Muy sencillo de implementar, consiste en plantar diferentes hortalizas en cada parterre, alternando su posición cada año.

En el huerto, la rotación de cultivos es una técnica tradicional que ayuda a mantener el suelo rico de forma natural. Muy sencillo de implementar, consiste en plantar diferentes hortalizas en cada parterre, alternando su posición cada año.

En primavera, el jardín vuelve al centro de nuestros pensamientos: es necesario sembrar, trasplantar, disponer estacas y fertilizar donde se necesite. Antes de comenzar, se sugiere evaluar la técnica de rotación de cultivos, que sirve para evitar el cultivo de plantas con características particulares en el mismo macizo de flores durante varios años . De esta forma se obtienen numerosas ventajas :

  • mantener la fertilidad del suelo
  • mejorar la calidad y el rendimiento de la producción hortícola
  • reducir el crecimiento de malezas
  • el uso limitado de productos químicos con acción fitosanitaria porque las plantas se enferman menos
  • ahorros en la compra de productos fitosanitarios y menor contaminación ambiental.

Sin embargo, para obtener el mejor resultado, es necesario que la rotación siga algunas reglas y que se lleve a cabo durante al menos 3-4 años consecutivos.

¿Para qué verduras se rotan?

Antes de abordar la rotación de cultivos, es importante conocer las características nutricionales de las verduras que está cultivando: algunas plantas son muy exigentes en términos de necesidades nutricionales y eliminan muchas sustancias preciosas del suelo, otras plantas son poco exigentes, otras aún enriquecen el suelo con elementos nutritivos, sin eliminar ninguno.

  • Legumbres : guisantes, judías verdes, judías, garbanzos, habas, son cultivos que enriquecen el suelo. Estas leguminosas fijan el nitrógeno atmosférico a nivel de los tubérculos de las raíces y enriquecen la fertilidad natural del suelo . Al final del cultivo no es necesario retirar las raíces de los cultivos del suelo .
  • Cultivos exigentes : tomate, berenjena y patata o calabacín, calabaza, pepino, sandía y melón. Todas estas plantas producen una gran masa vegetativa y una cosecha abundante aprovechando al máximo la fertilidad del suelo.
  • Cultivos poco exigentes: zanahorias, espinacas, plantas aromáticas.
  • Cultivos de exigencia media : ajo, zanahoria, cebolla, hinojo, lechuga, puerro y rábano.

Un ejemplo practico

Aquí hay un esquema de rotación de cultivos que se muestra en un pequeño jardín familiar dividido en 4 macizos de flores con una rotación de 4 años. Para no olvidar la sucesión de cultivos en los macizos de flores individuales, es importante anotar el esquema en un diario todos los años.