Los nematodos son pequeños parásitos, gusanos grandes de 2-6 cm que atacan los tejidos de las plantas vegetales. Por su forma también se les conoce como anguilas.
Chupan los tejidos de la planta, se forman las características agallas de las que podemos adivinar el ataque de estos gusanos, también transmiten virosis a cultivos hortícolas. El daño a las raíces también favorece la bacteriosis y las enfermedades fúngicas que luego provocan la pudrición del sistema radicular.
Los nematodos aparecen cuando la temperatura se calienta un poco y se eleva por encima de los 15/20 grados, comenzando en primavera.
Cómo defenderse de los nematodos
Para defender el jardín de los nematodos se pueden utilizar plantas nematodicidas como el rábano picante, la mostaza blanca o la caléndula, cuyas raíces liberan sustancias tóxicas que matan o inhiben la reproducción de estos gusanos. Estas plantas se pueden diseminar en el jardín o incluso hacer un abono verde para exterminar a los parásitos.
Un método que mata a los nematodos es la solarización, en la cual, utilizando el sol, se desinfecta el suelo con calor; para ello, es necesario cubrir el suelo húmedo con láminas transparentes, remetidas con tierra en los bordes y dejar por lo menos 3/4 semanas.
La rotación de cultivos evita los nematodos , impidiendo que se propaguen a expensas de un cultivo en su bienvenida.
Nematodos útiles
También existen nematodos entomopatógenos , los cuales son útiles para el huerto en determinadas situaciones porque pueden usarse para matar otros parásitos, este método de control biológico es útil por ejemplo para deshacerse de larvas de escarabajo y ozziorrinco.