Solo un poco de color y fantasía son suficientes para renovar el aspecto de un frasco viejo y convertirlo en una flor o un macetero. Aquí hay una idea muy rápida para hacer una maceta con un aspecto elegante y minimalista, tal vez reutilizando un objeto rescatado , que quería tirar. Para revivir un rincón verde de la casa, como decoración para la mesa de Pascua y / o para poner en una estantería.
Materiales necesarios: tarro de recuperación; etiquetas adhesivas circulares; colores en spray: blanco y cobre; cortador; periódico.
De tarro anónimo a macetero. Los pasos de nuestro bricolaje
Ejecución
- Limpia a fondo el jarrón con agua o un paño de algodón, eliminando la suciedad y la suciedad residuales, luego déjalo secar al sol. Colócalo sobre una superficie protegida con papel periódico, preferiblemente en un área bien ventilada, luego coloréalo con más capas de spray blanco. Dejar secar y repetir internamente, varias veces si es necesario.
- Aplique las etiquetas adhesivas circulares en la superficie del frasco cuidando de colocarlas uniformemente y a la misma distancia.
- Continuar con la operación presionando cuidadosamente sobre las etiquetas con un paño, para favorecer la adherencia a la superficie del jarrón y evitar que el color pueda atravesar la pantalla.
- Trabajando en un ambiente bien ventilado protegido con papel de periódico, coloreado en macetas con spray de cobre. Deje que se seque y repita internamente, luego vuelva a decorar si es necesario para obtener un color uniforme y completo.
- Una vez finalizado el secado, retira las etiquetas adhesivas con la ayuda del cortador, cuidando de no rayar la superficie del jarrón.
Una alternativa: puedes reemplazar las etiquetas circulares con formas rectangulares o triangulares hechas cortando un poco de película adhesiva sobrante o creando una serie de entrelazados fijando cinta adhesiva de papel. El color cobre se puede reemplazar con oro aplicando un tono de rosa como base.
Un consejo: para un trabajo preciso es bueno esparcir el color del spray en un lugar al aire libre, cuidando de no ensuciar las superficies de la base. También es mejor proteger el tracto respiratorio usando una máscara y rociando el color a 30 centímetros del soporte, para evitar la formación de goteos.
Una idea más: el jarrón podría acomodar flores recién cortadas, como una rama de melocotón o cerezo o delicadas anémonas. Simplemente vierta agua o inserte una taza de vidrio, si hay un agujero en la base o, si tiene tierra, fertilizante y semillas, algunas suculentas bonitas o plantas florales delicadas.
Limpia a fondo el jarrón con agua o un paño de algodón, eliminando cualquier residuo de suciedad y tierra, luego déjalo secar al sol. Colócalo sobre una superficie protegida con papel periódico, preferiblemente en un área bien ventilada, luego coloréalo con más velos de spray blanco. Dejar secar y repetir internamente, varias veces si es necesario.
Aplique las etiquetas adhesivas circulares en la superficie del frasco cuidando de colocarlas uniformemente y a la misma distancia.
Continuar con la operación presionando cuidadosamente sobre las etiquetas con un paño, para favorecer la adherencia a la superficie del jarrón y evitar que el color pueda atravesar la pantalla.
Trabajando en ambiente bien ventilado y protegido con papel de periódico, coloreado en macetas con spray de cobre. Deje que se seque y repita internamente, luego vuelva a decorar si es necesario para obtener un color uniforme y completo.
Una vez finalizado el secado, retira las etiquetas adhesivas con la ayuda del cortador, cuidando de no rayar la superficie del jarrón.
Estilismo y realización: Monica Cresci