De moda en los hogares contemporáneos, porque es elegante y refinado, el gris en la pared realza especialmente los ambientes con muebles blancos. Pero si quieres algo diferente, más decorativo y más económico que la opción de colocar un papel pintado, por ejemplo con diseños geométricos, con el DIY puedes crear un fondo perfecto para la pared de un dormitorio , quizás el que está detrás de la cama, o del salón detrás del sofá, donde a veces no se sabe "llenar" el vacío, excepto con cuadros o estanterías.
Inspirándonos en el diseño de unos sofisticados papeles pintados, te contamos cómo decorar la pared, utilizando pintura y cinta de papel para obtener líneas contrastantes. Al optar por la tapicería, donde los diseños se hacen con impresión, las líneas obviamente pueden ser mucho más delgadas, que lo que puedes hacer con el bricolaje, con pintura y cinta de papel (cuyo ancho suele ser al menos 1 cm será el de las líneas a obtener). También se debe considerar que cuanto más delgada sea la cinta, más complicado puede ser crear la textura geométrica; el material a utilizar debe ser delicado y al mismo tiempo adherirse perfectamente a la pared. Para facilitar el trabajo, proponemos utilizar el de 2,5 cm.
En cuanto al color, hemos optado por el gris, pero el trabajo se puede realizar en cualquier otro color dependiendo de los acabados de las tonalidades presentes en la casa.
Material necesario para decorar la pared.
- Pared ya preparada para ser pintada
- Cinta de papel de 2,5 cm de altura
- Phon
- Pintura gris lavable
- Pequeño cepillo suave o rodillo de espuma con su recipiente para el color.
- Papel de cocina
- Láminas de protección para zócalos y suelos
- Escalera
- Cortador
Método
Esta decoración debe realizarse en una pared en buen estado y ya pintada con un color claro que servirá de base. Es un trabajo sencillo y solo requiere un poco de atención en unos pocos pasos para evitar manchas de color.
Dibuja un esquema indicativo que te ayudará durante tu trabajo.
Comienza a formar las figuras del diseño con la cinta de papel, siguiendo el diagrama. Siempre tire de la cinta con fuerza para hacer líneas rectas y apriétela firmemente a lo largo de los bordes. En las intersecciones de las líneas, corte las partes sobrantes con la navaja.
Repite esta operación para delimitar todos los cuadrados a pintar.
Una vez que haya pegado toda la cinta, comience a pintar un cuadrado a la vez con la brocha o rodillo pequeño. ¡El color debe diluirse muy poco! Tira bien del color para evitar que se acumule cerca de la cinta de papel, que quedaría en relieve una vez que se quita el enmascaramiento y la pintura de la cinta de papel hacia adentro.
Pintar toda la pared y dejar secar medio día. Si es necesario, aplique también una segunda capa. Después de que toda la pintura se haya secado muy bien, puede comenzar a quitar la cinta. Para hacer este último paso, te sugiero que te ayudes con un secador de pelo. El calor derrite el pegamento de la cinta de papel que así se desprende fácilmente y no corre el riesgo de quitar el color de la base.
¡El muro está terminado!
El trabajo de Samantha, http://samanthaceccobelli.jimdo.com